Siempre que se realiza el diseño de un sistema electrónico se debe tener en cuenta en qué condiciones estará funcionando. No siempre es posible realizar todas las pruebas de funcionamiento sobre el terreno y por ello es necesario disponer de entornos de laboratorio en los que poder hacerlas previamente. Con la idea de cubrir esta necesidad ha surgido este proyecto, en el que se ha desarrollado un sistema sobre el cual poder realizar dichas pruebas de funcionamiento controlando la temperatura.
El funcionamiento del sistema es sencillo, el usuario debe conectarse a la Raspberry Pi 2, que se utiliza como sistema de control. Una vez conectado deberá ejecutar el software desarrollado y el propio sistema le pedirá uno por uno los valores necesarios para definir el perfil de temperatura del experimento. Al finalizar el experimento el sistema ofrece un archivo en el que se han almacenado las lecturas segundo a segundo realizadas por los sensores internos.
La caja se ha realizado de madera por ser un material resistente a focos de temperatura altos y poderse manejar fácilmente a la hora de realizar un montaje casero. El sensado de la temperatura se realiza mediante termopares tipo K a los que se ha añadido un convertidor ADC específico para este tipo de dispositivos. El calor se genera mediante tubos de infrarrojos similares a los que podemos encontrar en las estufas eléctricas de casa o en lámparas para mantener la comida caliente. Además el sistema cuenta con un conjunto de ventiladores y ventanas que pueden abrirse de manera controlada para expulsar el calor del interior del sistema.